En Legalion Abogados defendemos a todo tipo de trabajadores, sin importar si el empleador es una empresa privada o una administración pública. En este caso concreto, ayudamos a una madre que nos contactó para defender los derechos laborales de su hijo, quien había trabajado como socorrista en la piscina municipal de Mozárbez (Salamanca) durante la temporada de verano.

El joven había finalizado su contrato con normalidad, pero al recibir el finiquito, detectaron que no se le había abonado todo lo que legalmente le correspondía. En concreto, se le adeudaban:

• Las vacaciones generadas y no disfrutadas durante el periodo trabajado.
• Varias horas extras que había realizado, y que no figuraban ni en el finiquito ni en el cálculo salarial final.

Aunque se trataba de una relación laboral, al haber sido contratado por una administración pública como personal laboral temporal, el procedimiento judicial requería un enfoque específico. No se podía acudir a la conciliación previa habitual en el ámbito laboral privado, sino que era necesario presentar directamente la demanda ante el Juzgado de lo Social competente.

Desde Legalion Abogados nos encargamos de preparar toda la documentación necesaria: contrato, calendario laboral, partes horarios y cálculo exacto de las cantidades pendientes. Redactamos una demanda clara, bien fundamentada, y la presentamos solicitando el pago de 331,54 euros en concepto de finiquito mal calculado.

El día del juicio, al ver la solidez de nuestra reclamación y la documentación presentada, el Ayuntamiento de Mozárbez reconoció en su totalidad las cantidades reclamadas, evitando así una sentencia condenatoria. Nuestro cliente —y su familia— recibieron íntegramente los 331,54 euros que se les debían, poniendo fin a una situación injusta que no debería haberse producido.

Aunque la cantidad en disputa no era elevada, el caso tiene un valor especial por varias razones:

Era un joven trabajador en su primer empleo de temporada, lo que lo hacía especialmente vulnerable ante errores o abusos administrativos.

1. La administración pública tiene la obligación de actuar con la máxima diligencia, algo que en este caso no ocurrió.
2. La intervención de un abogado fue decisiva para que el Ayuntamiento reconociera la deuda sin dilaciones adicionales.

Para nuestra clienta (la madre del trabajador), fue una gran tranquilidad saber que su hijo no estaba solo, y que el trabajo realizado durante el verano sería justamente remunerado. Y para nosotros, fue un nuevo ejemplo de cómo la justicia también está en los detalles, y de que cada euro mal pagado cuenta cuando se trata del esfuerzo de una persona trabajadora.

En Legalion Abogados nos tomamos cada caso con la seriedad que merece, y no hay reclamación “pequeña” cuando se trata de defender un derecho. Sea frente a una gran empresa o una administración pública, siempre vamos a estar al lado de nuestros clientes para asegurarnos de que se haga justicia.