Situación inicial. Nuestro cliente estaba en baja médica por contingencia profesional. La Mutua emitió un alta pese a que seguían pendientes pruebas diagnósticas necesarias para conocer el estado clínico real y la capacidad laboral efectiva.
Estrategia legal. Tras revisar el historial y la citación de pruebas no practicadas, presentamos impugnación del alta directamente ante el INSS, fundamentando:
- la insuficiencia de base clínica del alta,
- la necesidad de completar las pruebas pendientes para una valoración médica válida,
- el riesgo para la salud y la posible recaída por reincorporación prematura,
- y el principio de precaución en procesos derivados de contingencia profesional.
Adjuntamos informes médicos, solicitudes de citas y justificantes de pruebas programadas, además de un relato cronológico de la evolución clínica.
Resultado. Tras analizar la documentación y valorar las pruebas pendientes, el INSS nos da la razón y revoca el alta emitida por la Mutua, restituyendo al trabajador a su situación de baja médica. Con ello, se mantienen las prestaciones de incapacidad temporal y la protección sanitaria hasta completar el estudio diagnóstico y exista una valoración médica suficiente.
Claves del éxito.
- Actuación rápida ante un alta discutible.
- Acreditación documental de pruebas pendientes y evolución clínica.
- Enfatizar la seguridad del paciente y la necesidad de una valoración completa antes de cualquier reincorporación.
Impacto para el cliente. Se evitó una vuelta prematura al trabajo, se preservó la salud, y se garantizó la continuidad de las prestaciones hasta que la situación médica pueda ser correctamente determinada.